Andino, caribeño, pacífico, el corazón de Colombia también late al ritmo de la Amazonia. Visita una comunidad ticuna, pesca pirañas con ellas, piérdete por los callejones del pueblo de Puerto Nariño, en la plaza improvisa un partido de fútbol con los niños del pueblo. Al final de la tarde, deslícese por el río Amazonas siguiendo los delfines rosados y, por la noche, escuche el bosque, atrévase a aventurarse allí y duerma con titíes pigmeos, capuchinos pero también tucanes, ibis escarlata y, sobre todo, los extraños sentimiento de compartir la misma tierra.